martes, 26 de octubre de 2010

Encuentro Internacional Jorge Enrique Adoum




Hoy (10 am) empezó el Primer Encuentro Internacional de Jóvenes Escritores en la ciudad de Ambato en Honor a Jorge Enrique Adoum. Esta iniciativa de gobierno cuenta con el apoyo de la Ilustre Municipalidad de Ambato, Consejo Provincial de Tungurahua y la Universidad Técnica de Ambato.

El Encuentro Internacional, que durará hasta el próximo viernes, tendrá una intensa agenda cultural como recitales, performance, talleres literarios, presentaciones de libros, conversatorios; se contará con la presencia de poetas de los países de Chile, Colombia, Perú, Bolivia, Venezuela, Cuba y Guatemala en un total de ocho escritores internacionales. A nivel nacional se tendrá la presencia de catorce escritores desde varios rincones de la provincia.

El encuentro contará además con varios espacios donde los visitante podrán debatir sobre distintos temas con cada uno de los escritores ya que está dirigido para niños, jóvenes, adultos y adultos mayores. Además tendrá la presencia de varias empresas editoras las cuales pondrán a disposición del público presente cada uno de sus libros, revistas, folletos, etc. producidas por las empresas.

viernes, 22 de octubre de 2010

Murcielagario y Sexo idiota

Pablo de Sexo idiota observando a público interesado en la propuesta de su colectivo.


El pasado miércoles, y esto por andar rodando en la feria de la PUCE, pude ser testigo de un mano a mano, o mejor dicho un verso a verso, entre dos jóvenes colectivos quiteños: Murcielagario de la Universidad Central y Sexo idiota de la Universidad Católica (lo curioso es que acá los colectivos se distinguen por sus instituciones, aunque algunos de sus integrantes ya hayan egresado).


En primera fila integrantes de los colectivos Murcielagario y Sexo idiota.


Un recital que además contó con la participación de los poetas Simón Zavala, Manuel Zavala y dos autoras más. Propuestas interesantes, poesía que intenta salir un poco de la cotidianidad, aunque está demarcada por ese “estilo” quiteño que muchos poetas presentan en su obra. El recital terminó con un polémico foro donde algunas integrantes de Sexo idiota dejaron claro que ya debe dejarse de etiquetar a los poetas por el género al que pertenecen, no existe poesía femenina ni masculina, solo personas que escriben poesía.




Agustín de Murcielagario.

Pude compartir, después de este evento, con los Murcielagario, quienes demostraron ser además de un sólido colectivo, amigos sobre todo. Esa camaradería entre ellos me hizo pensar en los colectivos literarios y culturales que existen, sobre todo, en la Costa, donde las rencillas y envidias entre ellos es una constante.

Bienvenidos amigos Murcielagaraio y Sexo idiota, esperemos que sus similares de otras ciudades y provincia puedan lograr una socialización y más unificación entre los colectivos de Ecuador.



Escritores ecuatorianos invitados al verso a verso.

lunes, 11 de octubre de 2010

La otra ciudad




Mercy, el Cholo, el Abogado, el Iguanero, son personajes acartonados; el retrato de sus vidas son las que pululan en las telenovelas, y mini series quisquillosas y apabullantes, pero más allá de esto la historia que presenta La otra ciudad (El ángel editor, 2009) de Lenin Lara Rivadeneira (Esmeraldas, 1979), es conocida en nuestro país, donde la corrupción, prepotencia de la policía y el silenciamiento de contrarios es una norma oscura a la que se sobrevive y es mejor adaptarse o simplemente huir.

Mercy desde el inicio es un personaje condenado, porque además de ser un travesti (habitando aquella ciudad prejuiciosa, violenta, accidentada desde sus habitantes) tiene principios y ética, lo que podría leerse como un vicho raro sobreviviendo y caminando sobre una cuerda floja. Su búsqueda no es carnal, si no idealizada, lo que en nuestro contexto resulta un peligro latente.

El Cholo además de ser la representatividad común, el arribista, enamoradizo, soñador con un futuro material, es quien resulta el personaje mejor logrado de la trama: negándose a sí mismo su anhelo material para centrarse en su anhelo emocional, donde el amor termina salvándolo de una “desaparición” segura junto a Mercy.

El Abogado, quien al inicio se nos presenta como un preocupado por la causa social, los ideales, la justicia y la verdad, la presión, las circunstancias y hasta una avaricia oculta termina demostrando lo contrario. Y aunque el personaje termine aceptando su error, su arrepentimiento es apenas una pequeña brisa fuera de aquella “otra ciudad” que él mismo se prestó en darle forma.

La otra ciudad no es una novela revelación, su estructura, economía de lenguaje, y personajes pudieron ser mejor delineados, pero su valor está en ser un recordatorio de la falsedad, hipocresía, injusticia y formas de callarnos, a las que acuden quienes ostentan alguna clase de poder. En nuestro país esta prepotencia está demás ejemplificada en cientos de casos oficiales y aislados.

La otra ciudad puede tener un fin dentro de la trama de Lara Rivadeneira, pero sabemos que la historia continúa, porque esa otra ciudad la encontramos desde los arrabales urbanomarginales hasta las metrópolis construidas desde una argucia desleal y de fondo sanguinolento.