martes, 4 de julio de 2023

Lo que dejamos de ser

La existencia individual ya es, por momentos, una tortura, ahora lidiar con una réplica que intenta ser mejor que uno, que es la versión fresca y vigorosa, algo así como el pasado mofándose de lo que somos, de lo que con los años nos convertimos: aniquilado el sueño interno, ciegos en una monotonía que parece ser el final del camino personal.

A eso nos arrastra Como vivir contigo mismo (2019). Una serie que en sus ocho capítulos nos deja claro que siempre habrá una versión mejor de nosotros mismos a la que odiamos porque nos recuerda lo que dejamos de ser. Pero la serie va más allá de lo que en apariencia denota: un hombre con su clon lidiando los problemas cotidianos y sin saber qué hacer o cómo alejar a su versión mejorada. Apunta a que el tedio es mala compañía para las relaciones sentimentales.

Porque el amor se desgasta, porque yacer en el círculo de la rutina va aniquilando el pálpito por el otro, dando la posibilidad de que nuevos latidos surjan en otras direcciones. Y eso ocurre, porque Kate, la esposa de llama apagada se interesa por la versión mejorada, ese Miles fresco y atento como del que estuvo enamorada hace varios años. 



 

Sin embargo, el tema de la infidelidad es complejo ¿cómo se es infiel con otra versión del mismo amor? Miles, después del celo hacia sí mismo (o esa versión que intenta superarlo en todo) reflexiona que tal vez lo sucedido es “saludable”, que quizás su otro yo llegó para salvar su matrimonio, que es probable que sus vidas (la de ella y él) necesitaron darle más emoción a su rutina de asco.

Una historia necesaria para toda pareja que intenta mejorar su relación. Una historia urgente para quienes nos entregamos al abismo irremediable de la sobrevivencia, ajustados a horarios laborales, pensando siempre que se intentó bastante, pero que ya no queda nada por hacer, que ese mundo que se buscó devorar nos ha aplastado con fuerza y ​​saña.